Odio odiar tanto

Me siento muy sola. No sé hacia dónde voy. No sé qué va a ser de mí. Odio basar mi estado de ánimo en los demás, y esta inseguridad patológica que padezco. Odio no saber qué decir y luego comerme la cabeza por eso. Tengo miedo del futuro, porque soy pesimista por naturaleza y pienso que no será bueno. Me odio a mí misma tanto a veces que no puedo soportarlo. Y al mundo. Mucho. Odio y amo a partes iguales esas películas que me hacen llorar, ¡putas películas románticas!, porque me recuerdan lo desgraciada que soy en ese aspecto de mi vida. Y 15 es un número que no puedo creer que exista. ¿Alguna vez se acabará este sufrimiento?

Lado bueno

¿Por qué siempre solemos quedarnos con las cosas malas que nos pasan? ¿de la vida? Seguro que todos hemos conocido a seres maravillosos, seres de luz, que eran todo bondad, y únicamente estamos tristes al recordarlos porque ya no están aquí, porque pudimos disfrutar poco tiempo de su compañía. Por lo demás fue un auténtico placer haber tenido el honor de conocerlos y haber pasado aunque sea un instante con ellos.

Fallar

Fallar. ¿Realmente he fallado tanto? Yo creo que no. ¿Entonces es una cuestión de suerte? No lo sé. Se suele decir que la suerte hay que buscarla, pero estoy convencida que eso como otras cosas, no siempre es así.
¿Hasta qué punto tengo la culpa? ¿Hasta qué punto he sido yo la responsable? Me duele pensar que quizá todo sea culpa mía. Pero, ¡joder!, no sé hacerlo de otra manera.